Impacto medio ambiental del plástico: cómo calcularlo

El tema de los materiales plásticos es extremadamente complejo y para valorar la sostenibilidad efectiva de un plástico es necesario tener en cuenta cuáles son las consecuencias a lo largo de todo el ciclo de vida: de los impactos que se generan durante el proceso de extracciones de la materia prima y posterior elaboración al rendimiento que se garantiza durante la fase de uso del producto, hasta su gestión y final de vida.

Además, es fundamental no generalizar:

debe idearse una estrategia de sostenibilidad para cada material específico y para cada sector de aplicación concreto.

Una empresa que desee innovar sus productos desde una óptica de sostenibilidad medio ambiental necesita un instrumento que le permita una valoración holística de los potenciales impactos en los diversos compartimentos ambientales a lo largo de todo el ciclo de vida del producto.

LCA – Evaluación del Ciclo de Vida: qué es y cómo funciona

La metodología internacionalmente reconocida para la valoración de la sostenibilidad medio ambiental de un producto es la Evaluación del Ciclo de Vida (LCA): estandarizada según las normativas internacionales ISO 14040 y 140044, la LCA analiza los aspectos medio ambientales y los potenciales impactos medio ambientales del producto a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la adquisición de las materias primas a la producción, de la utilización al final de la vida (de la cuna a la tumba).

Según cuanto previsto por la norma ISO 14040, un estudio de LCA debe estructurarse en cuatro fases consecutivas: definición de objetivos y campo de aplicación, análisis de inventario, valoración de los impactos e interpretación y mejora.

La fase de definición del objetivo y del campo de aplicación

En esta fase se definen el objetivo del estudio, la unidad funcional, esto es, la unidad de producto sobre la que tratará el análisis, y las fases del ciclo de vida consideradas en el estudio, que se dividen en:

• “De la Cuna a la Puerta”: esto es, de la extracción de las materias primas hasta la salida del producto del sitio productivo;
• “De la cuna a la tumba”: esto es, de la extracción de las materias primas hasta el final de vida.

La fase de análisis del inventario

Esta fase incluye la recopilación de todos los datos de entrada y de salida relativos al sistema que estudiar, construyendo un modelo que lo represente de la manera más verdadera posible

La fase de valoración de los impactos

En esta tercera fase se asocian los datos de inventario (fase dos) a categorías específicas de impactos medio ambientales. Las categorías de impacto ambiental son:

• Agotamiento de los recursos abióticos y agotamiento de los recursos bióticos: prevén la protección del bienestar humano, de la salud humana y de la de los ecosistemas, y la extracción de minerales y combustibles fósiles.
• Acidificación: se refiere a las sustancias acidificantes que causan una amplia gama de impactos en el suelo, aguas subterráneas, aguas superficiales, organismos, ecosistemas y materiales (edificios);
• Agotamiento de ozono atmosférico:
  se refiere al agotamiento del ozono estratosférico, que puede tener efectos nocivos en la salud humana, en la salud de los animales, en los ecosistemas terrestres y acuáticos, en los ciclos bioquímicos y en los materiales.
• Cambio climático: medido en CO₂ equivalente, está relacionado con las emisiones de gas de efecto invernadero y puede provocar efectos negativos en la salud de los ecosistemas, en la salud humana y en el bienestar material.
• Eutrofización:
  incluye todos los impactos debidos a niveles excesivos de macronutrientes en el ambiente provocados por las emisiones de sustancias nutritivas en el aire, en el agua y en el suelo.
• Formación de fotooxidantes: es la formación de sustancias reactivas (sobre todo, ozono) que son nocivas para la salud humana y los ecosistemas y que también pueden dañar los cultivos. Este problema se conoce también con la expresión «smog de verano», mientras que el smog de invierno no se incluye en el ámbito de esta categoría.
• Consumo de agua: este indicador valora el potencial de deprivación del recurso hídrico, tanto para las personas como para los ecosistemas, partiendo de la idea de que cuanta menos agua está disponible, más probable es que un ulterior usuario, sea humano o un ecosistema, carezca de ella (Boulay et al., 2016).

La fase de interpretación de los resultados

Es la fase final del procedimiento LCA, en la cual los resultados se resumen y tratan según la definición del objetivo y del campo de aplicación.

En esta fase se presentan de manera clara y transparente los resultados del estudio llevado a cabo: a través de la identificación de los componentes sobre los cuales se puede intervenir, se pueden aportar cambios capaces de reducir el impacto ambiental de todo el sistema.

FITT y la medida de su impacto medio ambiental

También FITT, en asociación con CESQA —Centro de Estudios de Calidad y Medio Ambiente— del Departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad de Padua, ha decidido medir el impacto medio ambiental de sus productos punteros mediante la LCA.

La Evaluación del Ciclo de Vida (LCA, por sus siglas en inglés) es un instrumento empírico basado en la obtención y el análisis de los datos que permite tener un mapeo científico de los impactos, para conocer las áreas de mejora y comunicarlas de manera transparente a todos los partícipes. La transparencia, lainnovación con el objetivo de crear productos mejores, con más rendimiento y menos impacto, junto a la interdependencia en implicar de manera proactiva todos los actores de la hilera productiva son los tres principios sobre los que se basa la estrategia de responsabilidad de FITT.

El objetivo de FITT es medir el impacto ambiental del 80% de sus productos antes de 2030.